El Hincha Chileno.

La verdad es que siempre he tenido una critica severa al hincha de la selección jugando de local. No es un hincha futbolero, más que nada va por un evento, al show. Eso fue fruto de la dirigencia de Harold. Y es cierto, le subió el pelo al producto, además que Bielsa fue magnetismo puro. Digamos que es un publico aburguesado, que sabe poco, alienta nada y "disfruta" del fútbol sentado.
Y eso gusta, porque es pacífico y más bonito televisivamente, digamos las cosas por su nombre, en Chile somos "estirados". Por lo mismo, yo no voy a ver a Chile al estadio, porque no me gusta andar sentado en la cancha (En la cancha!!) ni menos silente ni mucho menos contraído por decir una que otra "chuchada". Es el estadio, es fútbol y tengo sangre del Bulla, no me hueveén, no es cine.
Dicho eso, el hincha Chileno trotamundo, el aperrado, al estilo "chapulín", y que hoy son organizados bajo el nombre de "Marea Roja", es notable.
Es una hinchada de temer, brava como pocas. Con bombo, lienzos, "cánticos" y mucho, pero mucho aguante.
La mayoría es gente de pocos recursos, que se hace el animo de conocer el mundo con la selección (De las hazañas más valiosas que se tenga registro), dejando la piel, la garganta y las emociones en una medida desproporcional, como se hace con el amor, la fe y las grandes aventuras que valen, literalmente, la pena. Y es que no digamos que Chile es un campeón que gana en todos lados ni tampoco sería justo decir que aparecieron ahora, hace poco, en la era Bielsa. Para nada, viene de antes, mucho antes y si ahora hay más hinchas, es gracias al bendito crédito.
La marea roja es crack: Se endeuda, se cagá de frío, hambre y sigue como si nada, alentando al equipo, con una garra impropia a nuestro carácter. Y lo mejor es que cada día son más.
Chile es local jugando de visita o fuera del país, porque es ahí donde están los valiosos, son ellos quienes realmente piensan y disfrutan con la roja en su pecho, esa es la hinchada que a mi, personalmente, me pone la piel de gallina.