domingo, 10 de julio de 2011

El Chaqueteo


En esta copa América, como es normal e intrinsico en nuestra sociedad, cada vez que algo importante está ocurriendo o pasando, aparece con todo ese vozarrón propio que nos es tan fiel, el chaqueteo. A veces como expresión popular, en otras como duelo de posiciones, en definitiva, es una manifestación que al ser canalizada como "chaquetera" se intenta reducir la idea adversa en algo simple, temporal, emocional y obviamente, errónea.

¿Somos así los Chilenos?

Por cierto que lo somos.

Chaquetero viene de "cambiarse la chaqueta"(como se ve en la foto), pero así como en España tiene una connotación eminentemente negativa, por acá es algo un poco más divertido. Haremos un análsis al término social nuestro.

¿Cuándo estamos en presencia de una actitud, eminentemente y limpiamente, Chaquetera? ¿Cómo podemos distinguir el chaqueteo con la cada vez más demonizada idea de tener visiones diferentes? (Digamos las cosas como son, hoy todo se victimiza, en todo se falta el respeto y todos tienen la razón. Nadie está sujeto a ser convencido ni mucho menos a tolerar una idea diferente, sería eso traición, inconsecuencia y últimamente, debilidad...Ay - con suspiro- de la democracia moderna - en sentido amplisimo, como diría un hombre de buena vida nocturna, decadente y mujeriego en virtud de la piscola, es decir, tolerante a todo tipo de cuerpos- Ay de la buena democracia que sólo ES aquella que nos conviene). Finalmente, ¿Cuales son las claves para dar con la persona chaquetera?, son tres preguntas que intentaré responder sin serenidad y con mucho de morbo.

La actitud chaquetera viene dada principalmente con el impulso de los resultados, del termómetro emocional, o en su defecto, con la idea "universal" de lo aceptado.
Ejemplos:
Un relato de Solabarrieta no es chaquetero, por ejemplo. Solabarrieta ve mal el fútbol, relata para la gallada, es amigo de los jugadores, les hace entrevistas emotivas, se involucra con la persona y por lo tanto, relata con el cariño que le da su posición y con el ojo pegado a la vega central, pero en ningún caso es chaquetero. Lo que él hace es Fraude, porque como dice Paulo (No Cohelo, aclaro) : "salvadas las palabras de la ley, eluden su sentido", eso hace el querido Fernando, fraude a la realidad minima del conocimiento futbolero, pero no chaquetea, no invierte su posición, fija una y trata de mantenerse pese a lo obvio, con cara seria y perfil de ganador. Sí, es una especie de "Peyote humano" que lucra (No invoquen a la Vallejos) con su sistema, en su modalidad. ¿Por qué peyote? Porque alucina.

Un ejemplo de chaqueteo, que podemos dar, brevemente (me acorde de krammer), es lo que pasa con Piñera y con bachelet. Un presidente que nos tiene agotados, que en los libros de historia pasará por un revolucionario, pero que no tiene "feeling" y que apoyarlo parece ser un desatino. No es chic. Eso es chaqueteo. De pronto, todos son ambientalistas, expertos en educación y super estatales; Por parte de bachelet, haciendo un gobierno mediocre (si pue, si yo también soy chaquetero), ir en su contra era descabellado, mala onda, incluso un insulto a la inteligencia nacional. Tan buena ella, tan de a pie y cercana.
¿En qué sustento mi opinión? Resultados en las urnas. Y lo digo hoy, la derecha gana el 2013 de nuevo. ¿dónde está el chaqueteo? En el termómetro del momento, en el "análisis" emocional. ¿Dónde está la verdad? Como diría mi buen amigo Ricardo Lagos, en las instituciones. Cuándo vale, votamos, cuando no vale, chaqueteamos. Y nos gusta ser chaqueteros, es como dicel tango: "El que no llora, no mama".

La delgada línea diferenciadora entre el chaqueteo y la combatividad de opiniones, se da en dos circunstancias sumadas. Por una parte, el chaqueteo es extremo, "Todo bien" o "Todo mal", y por otra parte, es cambiante, tanto que a veces se llega al eufemismo de llamarse "evolución intelectual", nada más delirante.
Ejemplos:
Las vuidas de Bielsa no es chaqueteo. Es una posición, para algunos un lamento emotivo, un adiós no querido, un tierno deseo que los recuerdos no se consumen, que la experiencia siga ligada, el no abandono de algo que se quiere. Para otros, una doctrina, una manera de ver y gustar el fútbol, una idea que la queremos para siempre a nuestro lado, como guía, en los errores, en los procesos, más allá del camino, fiel a su lado. Yo soy una viuda, represento al cariño y a la doctrina, y es un lamento que voy a tener como mancha para siempre, sin errores no se vive, sin admiración no vale la pena.

Lo que es chaquetero es aquella idea que vagabundea en el océano de lo indeterminado. O sea, ultra perdido. Ejemplos hay miles, pero para seguir con la veta romántica, Hoy socialmente al tener a una mujer más audaz, empoderada, libre y segura (también son más fáciles, no crean que sólo hay halagos, este es un blog masculino), en concreto, al existir hoy muchas mujeres mejores que nosotros en casi todo, que exigen lo que valen y quieren lo que desean, el hombre moderno, el "peor es nada" que deja la vida por un título universitario (miren lo ridiculo, antes se era caballero y se combatía por principios nobles, ahora la idea es maximizar recursos y cumplir de 8 a 18 horas, se cuelga el titulo en alguna parte y parecemos "genios"), al andar cada día más inseguros, llenos de terapias, perfumes caros, sensibles y afeminados, llamamos a las mujeres "locas". Eso es cobardía, falta de coraje y hombría, es una demostración de desesperación. Que son raras, inestables, y todo eso, sí, pero refugiarse en que son "locas", eso me parece chaquetero. Y por qué chaquetero, porque son locas cuando te va mal. Cuando te va bien, hasta Arjona pasa piola.

Cómo descubrir al personaje chaquetero es muy divertido.
Primero, como dice el gran poeta Dr. House, "todos mienten", por lo tanto, lo chaquetero va en la nobleza de la mentira, uno se miente al hacer racional lo no racional, emocional lo racional, y en general, en todos esos hechos que uno matiza, oculta o simplemente contradice. Es decir, la mentira es parte de nuestro "gen" original, desde el balbuceo de Adán y Eva con Dios, hasta aceptar un "contrato" que claramente no se iba a cumplir (era obvio que se iban a comer la manzana, obvio), por lo tanto, siempre nos hemos autoengañado y hemos engañado. O sea, ser chaqueteros viene con eso que Maradona le dijo al Pato Oñate, "Chanta"(diganme si no hay mejor palabra que esa). Pero lo chaquetero no es sinónimo de mentira, es especie - genero. Chaquetear es una forma de mentira, pero va asociada a un juicio que por momentos nos creemos, o tratamos de convencer de que lo creemos. Un mentiroso es más propenso a ser chaquetero.

Segundo, poca productividad argumentativa. Cuando se chaqueta se argumenta bajo frases hechas, lugares comunes, resabios afectivos, dolores circunstanciales. Hoy que todo relato parece argumento, chaquetear es una zona de cultivo.

Finalmente, el chaquetero, pasado el tiempo, en general poco tiempo, matiza su posición, el chaquetero al ser tan inestable no es rencoroso, no mantiene por mucho tiempo una idea fija. insistimos, chaquetear no es fruto de una idea llevada a cabalidad, es una reacción. Todo se decanta, por el peso de la realidad o por el agobio que da muchas veces sostener una idea que te deprime, que es extrema y no concilia. Hay dos razones por las que nos gusta compartir con los demás, por las que hemos hecho sociedad, una es la utilidad, la necesidad. Otra, es porque nos gusta sentirnos parte de algo, cerca de muchos y ligados a la gente. Por eso jugamos fútbol, poker, existe facebook, escribimos y leemos.

Porque más allá de cualquier chaqueteo, siempre antes de un partido de la roja, llegamos con las mismas ganas y la misma ilusión, queremos que Chile gane y celebrar todos juntos. Así es el fútbol, así es la roja...

...Así es el chaquetero, perdón, así somos los chaqueteros.

Pd: También se dice de chaquetero quien no reconoce los meritos ajenos, pero eso es envidia. Y también hay quienes creen que ser chaquetero tiene que ver con la ironía y el humor en momentos importantes para los demás, eso se llama burla y es grosería.








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